martes, 18 de marzo de 2014

DESPIERTA, DESPIERTA.

Mira al horizonte y siente tu inmensidad,
eres universo, tierra, mar y cielo.
¿No sabes que eres el sueño de Dios...?

No busques fuera el anhelado tesoro, 
que posees y llevas dentro. 
¿ Ignoras que tú mismo eres divino Amor...?
Tu hermano es tu propio espejo,
en él se refleja tu alma, míralo y no lo juzgues.
¿Por qué lo culpas de tu dolor...?
No dejes que la emoción y el pensamiento
aniden en tu cuerpo y alumbren
la daga, la herida y la queja.

No permitas que el espejismo del miedo
 te esclavice, te paralice, te limite
y te cierre la puerta.

Llegaste para aprender a ser, a amar
a tu hermano y el universo te mira
te premia y te alienta.
 Unidos eternamente en espíritu,
el cuerpo, que palpamos no existe,
es una ilusión pasajera y ficticia.

Sólo el perdón nos dá alas, nos libera 
de nuestra propia cárcel
y al volar curamos la herida.

¡¡DESPIERTA, DESPIERTA y siente en tu alma,
que eres reflejo del Creador y tienes
la paz, la inmensidad y la dicha...!!

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