viernes, 1 de febrero de 2013
MAS ALLA DE LO BUENO Y DE LO MALO
De acuerdo al TAO, “Cuando las personas ven
algunas cosas como buenas,
otras cosas se convierten en malas.”
En este mundo de la conciencia de la dualidad, hemos entrenado a nuestras mentes para ver algunas cosas como buenas y algunas cosas como malas. Asimismo, la
mente tiene un almacén de ideas y pensamientos presentados sobre el bien y el mal como lo perciben nuestros sentidos y lo enseña la sociedad. Y nosotros
somos los Creadores y los organizadores de esta obra
completa de bueno y malo. El significado para todo en la vida es el significado que le hemos dado. Somos absolutamente responsables de nuestra creación. Nadie más es responsable de hacernos sentir bien o mal.
Le damos significados a las situaciones de la vida y creamos juicios. Seguimos juzgando a los demás y a nosotros mismos creando dolor, estrés, y divisiones contra nosotros mismos y
los demás. La resistencia, la comparación, y la competencia se vuelven el tema de las situaciones cotidianas.
Comenzamos a una edad muy temprana con
pensamientos de:
"No soy lo suficientemente bueno, no puedo estar
satisfecho conmigo mismo, Tengo que ser mejor, más grande, más rápido, más inteligente ", y la lista sigue y sigue. Luego se desarrolla con nuestras relaciones con otras personas, otros países y el mundo en general. La división ocurre y allí se convierte en una gran cantidad de dolor
y angustia en el corazón.
La vida como un humano con la mente anclada en el juicio crea sufrimiento. El sufrimiento siempre se debe a la percepción de bueno o malo. Tomar parte en la carrera es bueno, pero cuando se considera como ganar o perder,
entonces se convierte en sufrimiento. El dolor es una , pero
cuando se considera como malo, se convierte en sufrimiento.
El corazón es el lugar de la pureza, un lugar donde hay
unidad, y un lugar de ilimitación íntegra. Somos grandes seres magníficos que optaron por mantener una parte más diminuta de nosotros mismos en estos cuerpos humanos
para experimentar el regalo de una vida humana. Nos hemos olvidado de nuestra magnificencia, y sólo nuestro corazón conoce esta parte mayor de nuestro ser. Por lo tanto, el corazón nunca se ve comprometido por la
ilusión de los juicios de bueno o malo.
Vivir en unidad con el corazón, trae consuelo y paz. Para vivir en unidad con el corazón, uno tiene que morir. En esta contemplación, me viene a la memoria el versículo de la
Oración de San Francisco de Asís:
“Es muriendo que nacemos a la vida eterna.”
Si observan a las personas en su lecho de muerte, tienen una sonrisa radiante, saben que no hay esperanza, la toma de decisiones ahora está fuera de sus manos y de sus mentes. ¡Están experimentando la libertad!
La autentica verdad sobre la muerte mientras se está vivo es dejar ir todas las divisiones de bueno o malo, ir más allá de bueno o malo, ir más allá de lo que parece ser, estar en un estado neutral, y estar en un lugar de conciencia de no-elección. Es el arte de salir de la mente, observar la
mente, y ser un testigo.
~ Premlatha Rajkumar y Sheryl Lynn
Christian~ extracto de los Doce Pasos
hacia la Paz Interior
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