Sigue los pasos de esta receta y disfruta del resultado: ¡un día excelente!
1. Prográmate a ti mismo al levantarte. ¡Declara y asegura que tu día va a ser excelente! Mírate al espejo y convéncete a ti mismo que será así.
2. Haz ejercicio. Llénate de energía y no busques excusas de que “no hay tiempo”. Sí lo hay, ¡sin movimiento no hay energía!
3. Prioriza. Atiende lo urgente y luego, sí o sí, dale paso a lo importante.
4. Si tienes dudas entre hacer y no hacer, elige siempre hacer. ¿Qué puede pasar?
5. Conéctate con tu corazón: amor, confianza y paz. Mantén tu centro, respira, acéptate a cada momento y busca siempre lo mejor para ti al comer, hablar, actuar, pensar… ¡Todo el tiempo!
6. Mantén una actitud alegre. ¡Será tu escudo diario! Contra el cual, ninguna mala vibra podrá pasar. ¡Que te reboten las vibras negativas!
7. Nunca pierdas el entusiasmo. A pesar de cualquier situación que estés viviendo, mantente optimista y motivado en todo momento. ¡No te dejes caer!
Y si te gusta cómo funciona, ¡recomienda este platillo a todos tus amigos!
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