¿Cuál
es el origen de esta celebración? El solsticio de diciembre en el
hemisferio norte señala el día más corto del año, o la oscuridad más
prolongada. Pero a partir de ese momento, los días se hacen cada vez más
largos. En términos de la metafísica china, la fuerza luminosa Yang
renace y comienza a crecer. Hace frío y aún faltan muchos días para la
primavera, pero existe ya la esperanza de saber que el proceso de
declinación de la luz se ha revertido. Algunos investigadores sostienen
que la Navidad cristiana representa eso mismo, el renacer de la luz, por
eso se festeja tan cerca del solsticio.
Más
allá de las profecías, este 21 de diciembre es el día en que podemos
recuperar la esperanza. La luz y la oscuridad siempre han coexistido y
siempre se han alternado una con otra. Consideremos este día como el
momento en el cual lo oscuro comienza a ceder, para dar paso a la luz.
Cierto que nos falta recorrer un camino largo, pero si estamos pasando
pruebas duras, tomemos este solsticio como el punto de inflexión que
comenzará a elevarnos para conducirnos al éxito. Los alimentos que
tomemos hoy nos darán la fuerza que necesitamos, a la manera de los
tradicionales tang yuan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario